Oyes el agua golpear,
tiene sonido de hervor,
puedes sentir su frescor
si te logra salpicar.
Donde llegas a campear,
salta por piedras rodadas,
sus gruesas crestas rizadas
desliza por la corriente,
dejando impreso en tu mente:
¡el canto de sus cascadas.!
domingo, 2 de septiembre de 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario